Hay dos compartimentos en la caja de la marca: uno para un lápiz y otro para un sacapuntas. En el afilador hay un palo para sacudir las virutas. En un lápiz: un cepillo para peinar las cejas. Es de color puma, beige con un matiz gris pálido muy profundo. La textura del lápiz es cerosa en polvo, suave y maleable. Pinta con poca o ninguna presión y se desgasta rápidamente y debe afilarse con frecuencia para renovar su nitidez. A pesar de su holgura en la mina, este lápiz no se frota sobre la piel en todo el día sin perder su brillo y saturación. Las cejas corregidas por la mañana se pueden dejar puestas hasta la noche. A diferencia de los lápices en tonos más oscuros, este lápiz es más fácil de trabajar. No requiere el tipo de cuidado y precisión que se necesita al dibujar con colores más contrastantes. Incluso con líneas amplias y libres, el resultado parece aristocrático, noble y natural.
